¿Cómo funciona el gusto? y ¿Por qué tenemos
gusto?
Continuando con la pregunta anterior, parece
surgir otra espontáneamente, ¿Cómo funciona el gusto?, como obtenemos ese magnífico
placer de comer, ¿como sabemos a qué sabe algo?, y más importante ¿porque?, ¿porque
no podíamos vivir sin el gusto?, indudablemente podríamos vivir si la comida no
nos supiera a nada, así pues, ¿porque desarrollamos el gusto? pues ahora nos
adentramos ala interior de una boca, y nos posaremos sobre el principal órgano
del gusto; la lengua.
Viscoso ¿cierto?
Pues resulta
que este órgano es sorprendente, como casi todo en el cuerpo humano, refinada
por miles de miles de años de evolución y selección natural, es una masa
carnosa, llena de diminutos puntos que al acercarnos más vemos que son pequeñas
protuberancias en la lengua y es por eso que no la sentimos lisa.
Bien, a estas pequeñas protuberancias las
llamaremos “papilas gustativas” y son las que hacen que comer sea uno de los as
grandes deleites del ser humano, ellas envían al cerebro información acerca de
lo que está comiendo, y su sabor, en caso de que sea agradable pequeñas cargas
eléctricas envían sensaciones placenteras al cerebro, y en caso contrario
envían una sensación de desagrado y muchas veces podemos escupirlo en un acto
reflejo, si comemos algo que sabe mal, sin siquiera pensarlo el cerebro manda
la orden para escupir lo que haya en la boca, así de poderosa es la influencia
de la lengua.
Bien una vez explicado esto, pasaremos al
asunto del ¿Por qué?